Covid: Motivos para desconfiar

César Peña

Pachuca, 25 de mayo.- Un hombre en la clínica del ISSSTE de la Ciudad de México, es “diagnosticado” visualmente con Covid  en cinco minutos. Llegó por un padecimiento vesicular, es trasladado al área de enfermos por coronavirus, se le niega el derecho a ver a su familia y opta por darse a la fuga lo que logra gracias a la pésima vigilancia del lugar.

Ya afuera, se realiza tres pruebas que descartan totalmente que haya tenido Covid y las muestra públicamente para exhibir el maltrato, la negligencia y la deliberada estrategia de sembrar los hospitales con enfermos y muertos de Covid.

Pero este no es el primer y único caso de diagnósticos erróneos. Ya suman decenas, lo mismo que pacientes que se han fugado de las instituciones de salud en México, saliendo a flote ya no sólo omisiones que sugieren otra cosa más que la duda y el institucionalizado “sospechosismo” local.

Otro caso nos ayuda a profundizar en ello en el estado de Hidalgo. Miércoles 20 de mayo. Lugar: clínica del IMSS en la capital hidalguense. Una persona mayor, de nombre Eduardo, pierde la vida por un infarto. Hace meses tuvo un aviso previo y ya había sido llevado a este nosocomio de donde pudo regresar aquella vez a su hogar luego del preinfarto.

Sólo que esta ocasión no tuvo la misma suerte y falleció por esta falla cardiaca, algo que la familia estaba plenamente consciente, sin embargo, la hoja de defunción tenía algo raro; el fallecimiento destacaba, era por Covid, provocando el enojo de la esposa, que reclamaba una y otra vez esta situación.

Este caso se suma a los cientos similares que no sólo no llegan con ningún síntoma de Covid, sino que “mueren” por este virus cuando llegaron por otros males como ya lo hemos documentado.

Lo que sucedió en Zapotlán el pasado 15 de mayo es digno de analizarse. Fueron cavadas clandestinamente 5 fosas en el panteón de la comunidad de Acayuca hasta que la comunidad y el delegado lo descubrieron reclamándole al edil Erick Islas Cruz, quien sin saber como explicar la maquinaria del ayuntamiento en el camposanto, terminó por aceptar que las fosas “eran para muertos por Covid” (Paradigma).

Y aquí es donde comienzan mil preguntas pues la gente, cuando mueren sus parientes, buscan sepultarlos cerca de sus lugares de origen, por lo que es pertinente preguntar, ¿a quien se iba a enterrar en Acayuca? ¿a desconocidos? ¿a contagiados a los que no les avisarían a sus familias?

Circulan en el imaginario social mil versiones sin bases sobre el Covid como que es una campaña para acabar con los ancianos, que cada gobierno debe entregar 5 mil muertos, que les dan “bonos” a los doctores que atiendan a la gente afectada por Covid, que es un método de control poblacional, que irán a vacunar a la gente mayor para matarla en la entrega del Programa 65 y más, etc, etc, lo cierto es que el Gobierno ha abonado para que  estas y más versiones cobren fuerza.

Y es aquí donde los errores, omisiones y la deliberada y asustadiza pretensión de algunas autoridades, da pie para pensar mil cosas y lo peor, algunas con todo un sustento para confirmarlas.